domingo, 9 de junio de 2019

Ejemplo de procedimiento para la comprensión de textos filosóficos.


Nos planteamos en esta entrada dos objetivos:

1) Presentar una serie de requisitos que se han de tener presentes a la hora de hacer el esfuerzo de comprender un texto de filosofía.
2) Presentar un ejemplo concreto de procedimiento a seguir para llegar a esa comprensión y responder adecuadamente a la primera pregunta PAU. 

REQUISITOS PARA LEER Y COMPRENDER TEXTOS DE FILOSOFÍA

  1. Disponer de tiempo ya que se tratan de textos reflexivos que trasmiten ideas, generalmente ideas abstractas, o argumentos sobre tesis que requieren de un proceso de reflexión y maduración para captarlas, por lo que es necesario leer el texto las veces que fueran necesarias para comprenderlo.
  2. No existe una regla fija o un itinerario único para comprender un texto filosófico. Cada persona tiene sus propios mecanismos de comprensión lectora y es muy positivo que cada persona desarrolle su propia técnica personal de comprensión lectora. De ahí que, incluso pueda ser un despropósito intentar aconsejar de cómo leer un texto.
  3. Tener capacidad de concentración y de mantenimiento de la atención intelectual.
  4. Tener disposición para realizar una o varias lecturas para captar el sentido o idea general del texto e identificar de qué tipo de texto se trata: si se trata de un texto expositivo o argumentativo.
  5. Tener disposición para realizar lecturas por separado de los párrafos del texto con el fin de analizar las ideas, tesis y/o argumentos de cada párrafos. Para ello nos puede ayudar subrayar determinadas palabras clave.
  6. Dedicar tiempo a identificar los términos filosóficos clave y su significado técnico tanto en el texto como en la filosofía del autor que se pueda adquirir en otras fuentes distintas del texto. En este sentido es muy útil disponer de buenos diccionarios filosóficos o libros especializados que reflejen el sentido técnico de los términos en el autor que pretendemos comprender.
  7. Organizar las ideas del texto de acuerdo a un esquema jerárquico sirviéndose de herramientas como pueden ser mapas conceptuales u otras herramientas adecuadas.
EJEMPLO DE PROCEDIMIENTO A SEGUIR PARA COMPRENDER TEXTOS DE FILOSOFÍA


NATURALEZA DE LA VIRTUD ÉTICA 1.

 La virtud ética, un modo de ser de la recta acción

 Existen, pues, dos clases de virtud, la dianoética y la ética. La dianoética se origina y crece principalmente por la enseñanza, y por ello requiere experiencia y tiempo; la ética, en cambio, procede de la costumbre, como lo indica el nombre que varía ligeramente del de «costumbre» 1 . De este hecho resulta claro que ninguna de las virtudes éticas se produce en nosotros por naturaleza, puesto que ninguna cosa que existe por naturaleza se modifica por costumbre. Así la piedra que se mueve por naturaleza hacia abajo, no podría ser acostumbrada a moverse hacia arriba, aunque se intentara acostumbrarla lanzándola hacia arriba innumerables veces; ni el fuego, hacia abajo; ni ninguna otra cosa, de cierta naturaleza, podría acostumbrarse a ser de otra manera.  De ahí que las virtudes no se produzcan ni por naturaleza ni contra naturaleza, sino que nuestro natural  pueda recibirlas y perfeccionarlas mediante la costumbre .

Además, de todas las disposiciones naturales, adquirimos primero la capacidad y luego ejercemos las actividades. Esto es evidente en el caso de los sentidos; pues no por ver muchas veces u oír muchas veces adquirimos los sentidos, sino al revés: los usamos porque los tenemos, no los tenemos por haberlos usado. En cambio, adquirimos las virtudes como resultado de actividades anteriores. Y éste es el caso de las demás artes, pues lo que hay que hacer después de haber aprendido, lo aprendemos haciéndolo. Así nos hacemos constructores construyendo casas, y citaristas tocando la cítara. De un modo semejante, practicando la justicia nos hacemos justos; practicando la moderación, moderados, y practicando la virilidad, viriles. Esto viene confirmado por lo que ocurre en las ciudades: los legisladores hacen buenos a los ciudadanos haciéndoles adquirir ciertos hábitos, y ésta es la voluntad de todo legislador; pero los legisladores que no lo hacen bien yerran, y con esto se distingue el buen régimen del malo.

 Además, las mismas causas y los mismos medios producen y destruyen toda virtud, lo mismo que las artes; pues tocando la cítara se hacen tanto los buenos como los malos citaristas, y de manera análoga los constructores de casas y todo lo demás: pues construyendo bien  serán buenos constructores, y construyendo mal, malos. Si no fuera así, no habría necesidad de maestros, sino que todos serían de nacimiento buenos y malos. Y este es el caso también de las virtudes: pues por nuestra actuación en las transacciones con los demás hombres nos hacemos justos o injustos, y nuestra actuación en los peligros acostumbrándonos a tener miedo o coraje nos hace valientes o cobardes; y lo mismo ocurre con los apetitos y la ira: unos se vuelven moderados y mansos, otros licenciosos e iracundos, los unos por haberse comportado así en estas materias, y los otros de otro modo. En una palabra, los modos de ser surgen de las operaciones semejantes. De ahí la necesidad de efectuar cierta clase de actividades, pues los modos de ser siguen las correspondientes diferencias en estas actividades. Así, el adquirir un modo de ser de tal o cual manera desde la juventud tiene no poca importancia,  sino muchísima, o mejor, total.

1  Así el término éthikós procedería de éthos «carácter», que, a su vez, Aristóteles relaciona con éthos «hábito, costumbre».

1ª.- Sintetiza las ideas del texto mostrando en tu resumen la estructura argumentativa o expositiva desarrollada por el autor.

Para identificar y diferencias las ideas principales de las subordinadas, así como de los argumentos que las sustentan, y las conclusiones que se derivan, resulta muy útil fijarse en el tipo de conectores o nexos con los que están redactados los distintos párrafos y, cómo, los mismos párrafos, están conectados entre sí.

Seguidamente distinguimos:

En rojo los nexos.




NATURALEZA DE LA VIRTUD ÉTICA 1.

 La virtud ética, un modo de ser de la recta acción

 Existen, pues, dos clases de virtud, la dianoética y la ética. La dianoética se origina y crece principalmente por la enseñanza, y por ello requiere experiencia y tiempo; la ética, en cambio, procede de la costumbre, como lo indica el nombre que varía ligeramente del de «costumbre» 1 . De este hecho resulta claro que ninguna de las virtudes éticas se produce en nosotros por naturaleza, puesto que ninguna cosa que existe por naturaleza se modifica por costumbre. Así la piedra que se mueve por naturaleza hacia abajo, no podría ser acostumbrada a moverse hacia arriba, aunque se intentara acostumbrarla lanzándola hacia arriba innumerables veces; ni el fuego, hacia abajo; ni ninguna otra cosa, de cierta naturaleza, podría acostumbrarse a ser de otra manera.  De ahí que las virtudes no se produzcan ni por naturaleza ni contra naturaleza, sino que nuestro natural  pueda recibirlas perfeccionarlas mediante la costumbre .

Además, de todas las disposiciones naturales, adquirimos primero la capacidad y luego ejercemos las actividades. Esto es evidente en el caso de los sentidos; pues no por ver muchas veces u oír muchas veces adquirimos los sentidos, sino al revés: los usamos porque los tenemos, no los tenemos por haberlos usado. En cambio, adquirimos las virtudes como resultado de actividades anteriores. Y éste es el caso de las demás artes, pues lo que hay que hacer después de haber aprendido, lo aprendemos haciéndolo. Así nos hacemos constructores construyendo casas, y citaristas tocando la cítara. De un modo semejante, practicando la justicia nos hacemos justos; practicando la moderación, moderados, y practicando la virilidad, viriles. Esto viene confirmado por lo que ocurre en las ciudades: los legisladores hacen buenos a los ciudadanos haciéndoles adquirir ciertos hábitos, y ésta es la voluntad de todo legislador; pero los legisladores que no lo hacen bien yerran, y con esto se distingue el buen régimen del malo.

 Además, las mismas causas los mismos medios producen y destruyen toda virtud, lo mismo que las artes; pues tocando la cítara se hacen tanto los buenos como los malos citaristas, y de manera análoga los constructores de casas y todo lo demás: pues construyendo bien  serán buenos constructores, construyendo mal, malos. Si no fuera así, no habría necesidad de maestros, sino que todos serían de nacimiento buenos y malos. Y este es el caso también de las virtudes: pues por nuestra actuación en las transacciones con los demás hombres nos hacemos justos o injustos, y nuestra actuación en los peligros acostumbrándonos a tener miedo o coraje nos hace valientes o cobardes; y lo mismo ocurre con los apetitos y la ira: unos se vuelven moderados y mansos, otros licenciosos e iracundos, los unos por haberse comportado así en estas materias, y los otros de otro modo. En una palabra, los modos de ser surgen de las operaciones semejantes. De ahí la necesidad de efectuar cierta clase de actividades, pues los modos de ser siguen las correspondientes diferencias en estas actividades. Así, el adquirir un modo de ser de tal o cual manera desde la juventud tiene no poca importancia,  sino muchísima, o mejor, total.

1  Así el término éthikós procedería de éthos «carácter», que, a su vez, Aristóteles relaciona con éthos «hábito, costumbre».

Seguidamente distinguimos:

En rojo los nexos.
En azul las ideas principales

NATURALEZA DE LA VIRTUD ÉTICA 1.

 La virtud ética, un modo de ser de la recta acción

 Existen, pues, dos clases de virtud, la dianoética y la ética. La dianoética se origina y crece principalmente por la enseñanza, y por ello requiere experiencia y tiempo; la ética, en cambio, procede de la costumbre, como lo indica el nombre que varía ligeramente del de «costumbre» 1 . De este hecho resulta claro que ninguna de las virtudes éticas se produce en nosotros por naturaleza, puesto que ninguna cosa que existe por naturaleza se modifica por costumbre. Así la piedra que se mueve por naturaleza hacia abajo, no podría ser acostumbrada a moverse hacia arriba, aunque se intentara acostumbrarla lanzándola hacia arriba innumerables veces; ni el fuego, hacia abajo; ni ninguna otra cosa, de cierta naturaleza, podría acostumbrarse a ser de otra manera.  De ahí que las virtudes no se produzcan ni por naturaleza ni contra naturaleza, sino que nuestro natural  pueda recibirlas perfeccionarlas mediante la costumbre . 12)

Además, de todas las disposiciones naturales, adquirimos primero la capacidad y luego ejercemos las actividades. Esto es evidente en el caso de los sentidos; pues no por ver muchas veces u oír muchas veces adquirimos los sentidos, sino al revés: los usamos porque los tenemos, no los tenemos por haberlos usado. En cambio, adquirimos las virtudes como resultado de actividades anterioresY éste es el caso de las demás artes, pues lo que hay que hacer después de haber aprendido, lo aprendemos haciéndolo. Así nos hacemos constructores construyendo casas, y citaristas tocando la cítara. De un modo semejante, practicando la justicia nos hacemos justos; practicando la moderación, moderados, y practicando la virilidad, viriles. Esto viene confirmado por lo que ocurre en las ciudades: los legisladores hacen buenos a los ciudadanos haciéndoles adquirir ciertos hábitos, y ésta es la voluntad de todo legislador; pero los legisladores que no lo hacen bien yerran, y con esto se distingue el buen régimen del malo. (26)

 Además, las mismas causas y los mismos medios producen y destruyen toda virtud, lo mismo que las artes; pues tocando la cítara se hacen tanto los buenos como los malos citaristas, y de manera análoga los constructores de casas y todo lo demás: pues construyendo bien  serán buenos constructores, construyendo mal, malos. Si no fuera así, no habría necesidad de maestros, sino que todos serían de nacimiento buenos y malos. Y este es el caso también de las virtudes: pues por nuestra actuación en las transacciones con los demás hombres nos hacemos justos o injustos, y nuestra actuación en los peligros acostumbrándonos a tener miedo o coraje nos hace valientes o cobardes; y lo mismo ocurre con los apetitos y la ira: unos se vuelven moderados y mansos, otros licenciosos e iracundos, los unos por haberse comportado así en estas materias, y los otros de otro modo. En una palabra, los modos de ser surgen de las operaciones semejantesDe ahí la necesidad de efectuar cierta clase de actividades, pues los modos de ser siguen las correspondientes diferencias en estas actividades. Así, el adquirir un modo de ser de tal o cual manera desde la juventud tiene no poca importancia,  sino muchísima, o mejor, total.



Seguidamente distinguimos:

En rojo los nexos.
En azul las ideas principales
En verde las conclusiones a las que se llega.

NATURALEZA DE LA VIRTUD ÉTICA 1.

 La virtud ética, un modo de ser de la recta acción

 Existen, pues, dos clases de virtud, la dianoética y la ética. La dianoética se origina y crece principalmente por la enseñanza, y por ello requiere experiencia y tiempo; la ética, en cambio, procede de la costumbre, como lo indica el nombre que varía ligeramente del de «costumbre» 1 . De este hecho resulta claro que ninguna de las virtudes éticas se produce en nosotros por naturaleza, puesto que ninguna cosa que existe por naturaleza se modifica por costumbre. Así la piedra que se mueve por naturaleza hacia abajo, no podría ser acostumbrada a moverse hacia arriba, aunque se intentara acostumbrarla lanzándola hacia arriba innumerables veces; ni el fuego, hacia abajo; ni ninguna otra cosa, de cierta naturaleza, podría acostumbrarse a ser de otra manera.  De ahí que las virtudes no se produzcan ni por naturaleza ni contra naturaleza, sino que nuestro natural  pueda recibirlas y perfeccionarlas mediante la costumbre .

Además, de todas las disposiciones naturales, adquirimos primero la capacidad y luego ejercemos las actividades. Esto es evidente en el caso de los sentidos; pues no por ver muchas veces u oír muchas veces adquirimos los sentidos, sino al revés: los usamos porque los tenemos, no los tenemos por haberlos usado. En cambio, adquirimos las virtudes como resultado de actividades anterioresY éste es el caso de las demás artes, pues lo que hay que hacer después de haber aprendido, lo aprendemos haciéndolo. Así nos hacemos constructores construyendo casas, y citaristas tocando la cítara. De un modo semejante, practicando la justicia nos hacemos justos; practicando la moderación, moderados, y practicando la virilidad, viriles. Esto viene confirmado por lo que ocurre en las ciudades: los legisladores hacen buenos a los ciudadanos haciéndoles adquirir ciertos hábitos, y ésta es la voluntad de todo legislador; pero los legisladores que no lo hacen bien yerran, y con esto se distingue el buen régimen del malo.

 Además, las mismas causas y los mismos medios producen y destruyen toda virtud, lo mismo que las artes; pues tocando la cítara se hacen tanto los buenos como los malos citaristas, y de manera análoga los constructores de casas y todo lo demás: pues construyendo bien  serán buenos constructores, construyendo mal, malos. Si no fuera así, no habría necesidad de maestros, sino que todos serían de nacimiento buenos y malos. Y este es el caso también de las virtudes: pues por nuestra actuación en las transacciones con los demás hombres nos hacemos justos o injustos, y nuestra actuación en los peligros acostumbrándonos a tener miedo o coraje nos hace valientes o cobardes; y lo mismo ocurre con los apetitos y la ira: unos se vuelven moderados y mansos, otros licenciosos e iracundos, los unos por haberse comportado así en estas materias, y los otros de otro modo. En una palabra, los modos de ser surgen de las operaciones semejantesDe ahí la necesidad de efectuar cierta clase de actividades, pues los modos de ser siguen las correspondientes diferencias en estas actividadesAsíel adquirir un modo de ser de tal o cual manera desde la juventud tiene no poca importancia,  sino muchísima, o mejor, total.


Seguidamente distinguimos:

En rojo los nexos.
En azul las ideas principales
En verde las conclusiones a las que se llega.
En violeta los argumentos justificativos de las ideas principales.

NATURALEZA DE LA VIRTUD ÉTICA 1.

 La virtud ética, un modo de ser de la recta acción

 Existen, pues, dos clases de virtud, la dianoética y la ética. La dianoética se origina y crece principalmente por la enseñanza, y por ello requiere experiencia y tiempo; la ética, en cambio, procede de la costumbre, como lo indica el nombre que varía ligeramente del de «costumbre» 1 . De este hecho resulta claro que ninguna de las virtudes éticas se produce en nosotros por naturaleza, puesto que ninguna cosa que existe por naturaleza se modifica por costumbreAsí la piedra que se mueve por naturaleza hacia abajo, no podría ser acostumbrada a moverse hacia arriba, aunque se intentara acostumbrarla lanzándola hacia arriba innumerables vecesni el fuego, hacia abajo; ni ninguna otra cosa, de cierta naturaleza, podría acostumbrarse a ser de otra manera.  De ahí que las virtudes no se produzcan ni por naturaleza ni contra naturaleza, sino que nuestro natural  pueda recibirlas y perfeccionarlas mediante la costumbre .

Además, de todas las disposiciones naturales, adquirimos primero la capacidad y luego ejercemos las actividades. Esto es evidente en el caso de los sentidospues no por ver muchas veces u oír muchas veces adquirimos los sentidossino al revés: los usamos porque los tenemos, no los tenemos por haberlos usadoEn cambio, adquirimos las virtudes como resultado de actividades anterioresY éste es el caso de las demás artespues lo que hay que hacer después de haber aprendido, lo aprendemos haciéndoloAsí nos hacemos constructores construyendo casas, y citaristas tocando la cítaraDe un modo semejantepracticando la justicia nos hacemos justos; practicando la moderación, moderados, y practicando la virilidad, viriles. Esto viene confirmado por lo que ocurre en las ciudades: los legisladores hacen buenos a los ciudadanos haciéndoles adquirir ciertos hábitos, y ésta es la voluntad de todo legislador; pero los legisladores que no lo hacen bien yerran, y con esto se distingue el buen régimen del malo.

 Además, las mismas causas y los mismos medios producen y destruyen toda virtud, lo mismo que las artes; pues tocando la cítara se hacen tanto los buenos como los malos citaristas, y de manera análoga los constructores de casas y todo lo demás: pues construyendo bien  serán buenos constructoresconstruyendo mal, malosSi no fuera asíno habría necesidad de maestrossino que todos serían de nacimiento buenos y malosY este es el caso también de las virtudes: pues por nuestra actuación en las transacciones con los demás hombres nos hacemos justos o injustos, y nuestra actuación en los peligros acostumbrándonos a tener miedo o coraje nos hace valientes o cobardesy lo mismo ocurre con los apetitos y la ira: unos se vuelven moderados y mansos, otros licenciosos e iracundos, los unos por haberse comportado así en estas materias, y los otros de otro modoEn una palabra, los modos de ser surgen de las operaciones semejantesDe ahí la necesidad de efectuar cierta clase de actividades, pues los modos de ser siguen las correspondientes diferencias en estas actividadesAsíel adquirir un modo de ser de tal o cual manera desde la juventud tiene no poca importancia,  sino muchísima, o mejor, total.

Después de todo este proceso ya estamos en condiciones de responder a la primera pregunta de un examen PAU de filosofía.

1ª.- Sintetiza las ideas del texto mostrando en tu resumen la estructura argumentativa o expositiva desarrollada por la autora.


En este texto argumentativo Aristóteles nos ofrece las razones de tres ideas clave que son la conclusión del libro I de su Etica a Nicómaco.

En primer lugar afirma que existen, pues, dos clases de virtud, la dianoética y la ética. La dianoética se origina y crece principalmente por la enseñanza, y por ello requiere experiencia y tiempo; la ética, en cambio, procede de la costumbre (L. 1-3). Prueba esta afirmación con el ejemplo de la piedra y el fuego, pues al comportarse según naturaleza la costumbre nada puede modificar en su funcionamiento.

En segundo lugar sostiene que de todas las disposiciones naturales, adquirimos primero la capacidad y luego ejercemos las actividades. Esta afirmación la prueba con el ejemplo de los sentidos, ya que no los adquirimos por usarlos, sino que los usamos porque nacemos con ellos. En cambio, adquirimos las virtudes como resultado de actividades anteriores. (L. 13-14. 17) Esta afirmación la justifica con el ejemplo de que realizando acciones justas y moderadas nos volvemos justos y moderados respectivamente.

Y finalmente, afirma que las mismas causas y los mismos medios producen y destruyen toda virtud, esto lo argumenta con el ejemplo de tocar la cítara y construir casas, practicar la justicia y la moderación, pues lo podemos hacer estas cisas bien o mal, lo hacemos mal cuando sin reflexionar y siguiendo el impulso, nos damos a los extremos, y bien cuando buscamos el término medio mediante la recta razón. Por eso concluye que los modos de ser surgen de las operaciones semejantes (L. 27 y 37).

viernes, 15 de marzo de 2019

TRABAJO TERCER TRIMESTRE. ACTIVIDAD 1. GRUPOS 2º A, B y C





ACTIVIDAD 1:

1) El profesor adjudicará un tema de redacción filosófica sobre el filósofo del que en este momento es discípulo o debutante. La redacción será elaborada individualmente y de acuerdo a la misma rúbrica con la que se evaluó el trabajo anterior. El plazo máximo de presentación será el 3 de abril a las 23: 59. El trabajo será remitido a la siguiente dirección email: agullo_alf@iesnitdelalba.es. El trabajo no se remitirá en ningún caso en formato PDF, sino en  word.  El archivo adjunto llevará, el grupo al que pertenece el alumno, punto,  el apellido del alumno, punto, nombre del alumno, punto, y título de la redacción. Por ejemplo, un alumno que se llame Francisco Patiño, y que realice el trabajo sobre el método regresivo-progresivo en Simone de Beauvoir, remitirá un documento de word en  archivo adjunto con el siguiente título: 2ºA.Patiño.Francisco. El método regresivo-progresivo en Simone de Beauvoir. 


Consejos a seguir:

1) El libro básico de consulta es el de la editorial diálogo, es decir, el libro naranja que solemos utilizar en clase
2) Se pueden hacer citas textuales largas pero también es aconsejable comentar dichas citas haciendo ver que se entiende lo citado.
3) Identificad los ejemplos que pone el libro y tratad de comentarlos o buscad vosotros mismos ejemplos ilustrativos cuando las fuentes de consultan no los detallen.
4) La redacción puede tener entre  un mínimo de 2 páginas, y un máximo de 6 páginas, con letra arial, tamaño 12, inerlineado 1'5.
5) Tened en cuenta la rúbrica sobre la que seréis evaluadas/os.
6) Debéis citar al final de la redacción  las fuentes científicas que habéis consultado.

Seguidamente encontraréis las redacciones que ha de realizar cada alumno y cada alumna detallado por grupo, por filósofo y por tema:

TRABAJOS TERCER TRIMESTRE 2ºA

ARISTÓTELES





Temática
Nicolás Bono

Aristóteles. El personaje, su obra y su influencia
Aliya Hajizada

Aristóteles: Contexto Histórico, político y social
Manuel Delgado

Aristóteles. Contexto filosófico: los presocráticos, Sócrates, Platón
Alejandro González

Felicidad, bien y virtud.




Las excelencias del carácter o “virtudes éticas” y su relación con las “virtudes dianoéticas”
Héctor López

La finalidad práctica de la “Ética a Nicómaco”: acción, hábito y carácter.

Daniel Almagro


Las excelencias del carácter como términos medios: la individualización de la excelencia.
Alejandro Olivares

Las excelencias del carácter y su relación con el placer y la educación de las inclinaciones.
Fernando Ayala

El paradigma moral aristotélico.




Metafísica y Física.




Teoría del Conocimiento.




La Política.








DESCARTES





Temática
Manuel Ángel Romalde

Descartes y el contexto histórico. La crisis del viejo orden feudal, la crisis religiosa y política




Descartes y el contexto filosófico. El escepticismo renacentista
Héctor Calvo

Descartes y el contexto filosófico: la física Aristotélica y la astronomía renacentista.
María Aracil

Descartes y el contexto filosófico : las causas de la revolución científica y la mecánica de Galileo
Angel Cardoso

Descartes y el contexto filosófico: las consecuencias de la Nueva ciencia.




Descartes y el contexto filosófico: reflexiones sobre el método.




Descartes y el contexto filosófico: racionalismo y empirismo. Objetivo y punto de partida de la filosofía de Descartes.




El método cartesiano: ideal matemático de certeza, duda metódica y criterio de verdad.
Alejandro Lozano

Concepto de idea en Descartes y sus tipos.
Irene Marcos

Argumentos demostrativos de la existencia de Dios y del mundo.




Concepto de sustancia en Descartes y sus tipos.




Dualismo antropológico. Mecanicismo y libertad.




Moral provisional.









NIETZSCHE





Temática
Francisco Patiño

Biografía de Nietzsche y el contexto histórico: la gran Alemania, la revolución industrial, los movimientos obreros y el colonialismo.
Juan Carlos Barberá

Nietzsche y el contexto filosófico de desconfianza de la razón: los filósofos de la sospecha
Lexin Zhou.

Nietzsche y Shopenhauer: el fracaso de la ilustración.
Pedro Gázquez

El nuevo estilo de filosofía de Nietzsche y el método genealógico.
Marcos Pérez

Crítica de la racionalidad y la cultura occidental.
Mireia Morales

El conocimiento y la verdad en Nietzsche




Crítica de la moral y de la religión.
Claudia Ruiz

Crítica de Nietzsche a la democracia
Amai Sebastián

La muerte de Dios.




El nihilismo y el superhombre.




El vitalismo y la voluntad de poder.




Crítica del mundo metafísico: la verdad como metáfora.









SIMONE DE BEAUVOIR





Temática
Sergio Hervás

La biografía de Simone de Beauvoir y su relación con Sartre.
Gabriel Lidón

Simone de Beauvoir y sus ideas feministas ilustradas.
Javier Verdú

Simone de Beauvoir y la teoría psicoanalista.
Johana Sarasate

Simone de Beauvoir y el materialismo histórico.




Simone de Beauvoir y el pensamiento existencialista.




El existencialismo de J.P. Sarte y su influencia en el pensamiento de S. de Beauvoir.
Miguel Ángel Torá

Método regresivo-progresivo en el análisis de la condición femenina.




Problematización de la categoría “mujer”.




Lectura feminista de la dialéctica hegeliana del amo y del esclavo: la mujer como Otro en la sociedad patriarcal.




El concepto de sujeto situado.
Raúl Vargas

La socialización de la mujer. La mujer como producto artificial.
Lourdes Soto

La evolución de la condición de la mujer




TRABAJOS TERCER TRIMESTRE: REDACCIÓN FILOSÓFICA. GRUPO. 2B


ARISTÓTELES





Temática
Santiago Ortega

Aristóteles. El personaje, su obra y su influencia
Víctor Verdú

Aristóteles: Contexto Histórico, político y social
Mario López

Aristóteles. Contexto filosófico: los presocráticos, Sócrates, Platón
Sofía Pozo

Felicidad, bien y virtud.
Álvaro López

Las excelencias del carácter o “virtudes éticas” y su relación con las “virtudes dianoéticas”




La finalidad práctica de la “Ética a Nicómaco”: acción, hábito y carácter.




Las excelencias del carácter como términos medios: la individualización de la excelencia.




Las excelencias del carácter y su relación con el placer y la educación de las inclinaciones.




El paradigma moral aristotélico.




Metafísica y Física.




Teoría del Conocimiento.




La Política.








DESCARTES





Temática
Carlos Ramos

Descartes y el contexto histórico. La crisis del viejo orden feudal, la crisis religiosa y política
Daniel Carreres

Descartes y el contexto filosófico. El escepticismo renacentista
Emilio Ortiz

Descartes y el contexto filosófico: la física Aristotélica y la astronomía renacentista.
Álvaro Pérez

Descartes y el contexto filosófico : las causas de la revolución científica y la mecánica de Galileo
Alba Moreno

Descartes y el contexto filosófico: las consecuencias de la Nueva ciencia.




Descartes y el contexto filosófico: reflexiones sobre el método.




Descartes y el contexto filosófico: racionalismo y empirismo. Objetivo y punto de partida de la filosofía de Descartes.
Carmen Miralles

El método cartesiano: ideal matemático de certeza, duda metódica y criterio de verdad.




Concepto de idea en Descartes y sus tipos.




Argumentos demostrativos de la existencia de Dios y del mundo.
Nuria Mínguez.

Concepto de sustancia en Descartes y sus tipos.




Dualismo antropológico. Mecanicismo y libertad.




Moral provisional.









NIETZSCHE





Temática
Ye Yianquiang

Biografía de Nietzsche y el contexto histórico: la gran Alemania, la revolución industrial, los movimientos obreros y el colonialismo.
Raúl Fernández

Nietzsche y el contexto filosófico de desconfianza de la razón: los filósofos de la sospecha
Raúl Lidón

Nietzsche y Shopenhauer: el fracaso de la ilustración.
María Moreno

El nuevo estilo de filosofía de Nietzsche y el método genealógico.
Clara Ruiz

Crítica de la racionalidad y la cultura occidental.
Antonio Suárez

El conocimiento y la verdad en Nietzsche




Crítica de la moral y de la religión.




Crítica de Nietzsche a la democracia
Alicia Ros

La muerte de Dios.




El nihilismo y el superhombre.




El vitalismo y la voluntad de poder.




Crítica del mundo metafísico: la verdad como metáfora.






SIMONE DE BEAUVOIR





Temática
Paula Avilés

La biografía de Simone de Beauvoir y su relación con Sartre.
Andrea Puentes

Simone de Beauvoir y sus ideas feministas ilustradas.
Ivan Leiva

Simone de Beauvoir y la teoría psicoanalista.
Marcos Martínez

Simone de Beauvoir y el materialismo histórico.




Simone de Beauvoir y el pensamiento existencialista.
Mario Martínez

El existencialismo de J.P. Sarte y su influencia en el pensamiento de S. de Beauvoir.
Cristina Albero

Método regresivo-progresivo en el análisis de la condición femenina.




Problematización de la categoría “mujer”.
Alejandro Iniesta.

Lectura feminista de la dialéctica hegeliana del amo y del esclavo: la mujer como Otro en la sociedad patriarcal.




El concepto de sujeto situado.










TRABAJOS TERCER TRIMESTRE 2ºC


ARISTÓTELES





Temática
Aicha Campillo

Aristóteles. El personaje, su obra y su influenciaR
Rosa LLopis

Aristóteles: Contexto Histórico, político y social
Elena Campillo

Aristóteles. Contexto filosófico: los presocráticos, Sócrates, Platón
Sonia García

Felicidad, bien y virtud.




Las excelencias del carácter o “virtudes éticas” y su relación con las “virtudes dianoéticas”




La finalidad práctica de la “Ética a Nicómaco”: acción, hábito y carácter.




Las excelencias del carácter como términos medios: la individualización de la excelencia.
Darío Pascual.

Las excelencias del carácter y su relación con el placer y la educación de las inclinaciones.
Alen Rubio

El paradigma moral aristotélico.




Metafísica y Física.




Teoría del Conocimiento.




La Política.









DESCARTES





Temática
Aroa Carrión

Descartes y el contexto histórico. La crisis del viejo orden feudal, la crisis religiosa y política
Emily Castillo

Descartes y el contexto filosófico. El escepticismo renacentista
Cristián García.

Descartes y el contexto filosófico: la física Aristotélica y la astronomía renacentista.
María Martínez

Descartes y el contexto filosófico : las causas de la revolución científica y la mecánica de Galileo
Miguel Monera

Descartes y el contexto filosófico: las consecuencias de la Nueva ciencia.




Descartes y el contexto filosófico: reflexiones sobre el método.
Elia Sempere

Descartes y el contexto filosófico: racionalismo y empirismo. Objetivo y punto de partida de la filosofía de Descartes.




El método cartesiano: ideal matemático de certeza, duda metódica y criterio de verdad.
Paula Isabel Gómez

Concepto de idea en Descartes y sus tipos.
Julia Maciá.

Argumentos demostrativos de la existencia de Dios y del mundo.




Concepto de sustancia en Descartes y sus tipos.




Dualismo antropológico. Mecanicismo y libertad.




Moral provisional.








NIETZSCHE





Temática
David Barberá

Biografía de Nietzsche y el contexto histórico: la gran Alemania, la revolución industrial, los movimientos obreros y el colonialismo.
Mabel Pomares

Nietzsche y el contexto filosófico de desconfianza de la razón: los filósofos de la sospecha
Jesús Cuartero

Nietzsche y Shopenhauer: el fracaso de la ilustración.
Juan Carlos Candela

El nuevo estilo de filosofía de Nietzsche y el método genealógico.
Judith Tomás

Crítica de la racionalidad y la cultura occidental.
Nuria Marcos

El conocimiento y la verdad en Nietzsche
Noelia Cerdá

Crítica de la moral y de la religión.




Crítica de Nietzsche a la democracia




La muerte de Dios.




El nihilismo y el superhombre.




El vitalismo y la voluntad de poder.




Crítica del mundo metafísico: la verdad como metáfora.







SIMONE DE BEAUVOIR





Temática
Luisina Borgo

La biografía de Simone de Beauvoir y su relación con Sartre.
Alba Férriz

Simone de Beauvoir y sus ideas feministas ilustradas.
Miriam Girona

Simone de Beauvoir y la teoría psicoanalista.
Cyntia Brotons

Simone de Beauvoir y el materialismo histórico.
Ainhoa Boix

Simone de Beauvoir y el pensamiento existencialista.
Alberto Tremiño

El existencialismo de J.P. Sarte y su influencia en el pensamiento de S. de Beauvoir.
Joaquín Bas

Método regresivo-progresivo en el análisis de la condición femenina.




Problematización de la categoría “mujer”.
Paqui Bas

Lectura feminista de la dialéctica hegeliana del amo y del esclavo: la mujer como Otro en la sociedad patriarcal.




El concepto de sujeto situado.